La piel, que es el órgano más grande del cuerpo humano, cubre una superficie casi equivalente a 2 m2 y puede pesar hasta 10 kg. Sirve como barrera protectora frente el medio externo, al tiempo que mantiene internamente la homeostasia.
La piel está compuesta por dos capas principales, la epidermis y la dermis que reposan sobre una capa grasa denominada hipodermis (tejido subcutáneo). Tanto la epidermis como la dermis se componen a su vez de dos subcapas. La zona que ancla la epidermis a la dermis se denomina unión dermoepidérmica. Es responsable del intercambio de oxígeno, nutrientes y productos de desecho entre la dermis vascularizada y la epidermis avascular.
La epidermis es un epitelio pavimentoso córneo multiestratificado que normalmente tiene entre 0,03 mm y 0,05 mm de grosor y consta principalmente de queratinocitos en fases progresivas de diferenciación desde las capas más profundas a las más superficiales. Conforme se dividen los queratinocitos, se mueven de la capa más profunda a las capas más superficiales. Una vez alcanzan la capa córnea (la capa más externa) se desprenden en el proceso de recambio epidérmico, por ejemplo, después de bañarse o rascarse. Este proceso se denomina descamación. Un recambio epidérmico completo ("renovación de la piel") tarda aproximadamente 2 meses.
Comparada con la epidermis más delgada, la dermis es una red compleja que tiene componentes celulares y acelulares. Contiene vasos sanguíneos, nervios, raíces capilares y glándulas sudoríparas. Estructuralmente, la dermis consiste en dos subcapas, la dermis papilar superficial y la dermis reticular más profunda. Los bucles vasculares de la dermis papilar aportan nutrientes y oxígeno a la epidermis. El colágeno, que se encuentra principalmente en la dermis reticular, es la proteína estructural más importante de la dermis otorgándole a la piel su durabilidad. La elastina, otra importante proteína estructural de la dermis, la da a la piel su elasticidad.
Los fibroblastos son las células principales de la dermis y son responsables de la síntesis y degradación de las proteínas dérmicas (colágeno y elastina). Otras células halladas en la dermis son macrófagos y linfocitos. Estas células son parte del sistema inmunitario de la piel.
La hipodermis forma la base de la epidermis y la dermis y consiste principalmente de tejido conjuntivo y lóbulos de grasa sueltos. Contiene vasos sanguíneos y nervios más grandes que los hallados en la dermis. La hipodermis actúa principalmente de aislante y proporciona un almacenamiento energético.